La impresión 3D es una de las aplicaciones proptech que poco a poco se está empezando a perfilar como una alternativa real a los modelos de construcción convencionales, aunque todavía le queda mucho camino por recorrer. Hasta ahora, sólo hay una veintena de casos en todo el mundo, pero el sector es firme en su intención por innovar en impresión 3D y mejorar su aplicación en el ámbito de la construcción.

Ventajas de las técnicas de impresión 3D

La gran ventaja de la impresión 3D aplicada a la construcción es que es capaz de reducir los costes de producción de una obra hasta en un 35%. Por otro lado, destaca la rapidez de los procesos constructivos. Una vivienda de 70 m2 es capaz de imprimirse en menos de 24 horas. Además, minimiza los riesgos laborales, al no realizarse las tareas manuales que implican la construcción tradicional.

En cuanto al medio ambiente y la sostenibilidad, la impresión 3D cuenta con ciertas ventajas frente a la construcción tradicional: genera un residuo casi nulo, lo cual supone una reducción drástica de estos, y minimiza al máximo el consumo de energía asociada al transporte, ya que no hace falta trasladar los materiales del almacén o la fábrica a la obra. La construcción de viviendas a través de técnicas de impresión 3D tiene una huella ambiental muy inferior a la de los modelos tradicionales.


Vivienda piloto de 24 m2 realizada por la empresa Be More 3D.

Esta combinación de abaratamiento de costes, rapidez en los procesos constructivos y mejora de la sostenibilidad hacen de la impresión 3D un modelo constructivo muy ventajoso del que pueden beneficiarse, especialmente, proyectos sociales con incidencia en quienes más necesitan un hogar, o escenarios de ayuda humanitaria para reconstruir áreas enteras después de un conflicto o un desastre natural.

No todo es impresión 3D

No todos los elementos necesarios para construir una vivienda se imprimen en 3D. Hasta ahora, en 3D se imprime la estructura del edificio, siguiendo por ejemplo la técnica del contour crafting, por la cual la impresora deposita material capa sobre capa. Estas construcciones de contornos necesitan luego de la incorporación del resto de elementos, tales como techos, puertas y ventanas, además de toda la grifería y la instalación eléctrica. Los techos, eso sí, son prefabricados.

Puntos críticos

La impresión 3D empieza a asomarse al sector de la construcción, pero al tiempo que los entusiastas se vuelcan en señalar sus beneficios y sus bajos costes, otros no pierden del todo la perspectiva y señalan que las viviendas construidas bajo impresión 3D pueden no ofrecer las prestaciones que se requieren en la vivienda tradicional en España.

Aun así, con un largo camino aún por recorrer, la impresión 3D en construcción abre las puertas a un futuro en el que se puedan combinar sus ventajas con las prestaciones necesarias para ofrecer viviendas de la máxima calidad a nivel global.