La impresión 3D de edificios es considerada una técnica revolucionaria en construcción y en urbanismo. Consiste en la creación de objetos físicos mediante la colocación de materiales en capas, basándose en un modelo previamente diseñado en formato digital.

Esta tecnología de impresión en 3D aplicada en la construcción está ahora mismo en una constante evolución, pero ya ha demostrado su valía en proyectos reales y podemos identificar qué ventajas y desventajas ofrece para el sector.

Ventajas y desventajas de la impresión 3D de edificios

Entre las ventajas más destacables de la impresión 3D de edificios destaca su factor de sostenibilidad. Con esta tecnología se optimizan al máximo las materias primas que se utilizan en cualquier proyecto y, además, con un coste económico menor.

Es más, los residuos que se generan con la técnica de impresión 3D también son menores en cantidad que con un proyecto de construcción tradicional.

Algo determinante entre sus ventajas, es que la construcción mediante impresión 3D permite reducir los tiempos de producción, algo de vital importancia en cualquier proyecto de este tipo y por lo que está cobrando especial notoriedad.

Por otro lado, con la construcción en 3D conseguimos aplicar diseños de edificios más personalizados y adaptados a las condiciones necesarias que con un proyecto tradicional, en el que los cambios son poco prácticos.

En cualquier caso, no es una tecnología sin inconvenientes. Algunas aplicaciones no se han podido llevar a cabo o se han realizado con algunos límites, sobre todo relacionados con la altura de las construcciones.

También supone en la práctica requerir menos profesionales en un proyecto de construcción, dado que las máquinas de impresión se encargan de buena parte de todo el proceso.

Además, se pone en un papel protagonista una fase de trabajo que antes no tenía lugar, como es la creación del diseño para la impresión digital. De hecho, de él depende que el resto del proyecto se aplique de forma correcta, dado que si presenta un error, luego se trasladará a la impresión y de ella a la construcción.

Viabilidad de la construcción mediante impresión 3D

Los proyectos de construcción con impresión 3D comienzan a implantarse cada vez con mayor presencia, pese a ser una tecnología relativamente nueva.

De hecho, la primera casa que se construyó oficialmente con esta tecnología se desarrolló por una empresa china (Winsun) en el año 2015. Se trataba de un edificio de 5 plantas y una villa de 1.100 metros cuadrados.

Poco a poco los proyectos de construcción con impresión 3D se han ido extendiendo a otros países, entre ellos España. Aquí se edificó la primera vivienda de hormigón diseñada con impresión 3D en el año 2018, concretamente en la Universidad Politécnica de Valencia (UPV).

¿Será la impresión en 3D el futuro de la construcción? Lo cierto es que todavía se identifican importantes problemas a su aplicación práctica. El hecho de no poder hacer construcciones de gran altura es sobre todo el gran inconveniente que se asocia a esta tecnología.

Obviamente la impresión 3D de edificios sigue evolucionando y buscando superar sus propias limitaciones, pero por ahora se presenta como una alternativa sostenible y económica a la construcción tradicional, con la que cada vez se abordan más proyectos, por lo que es previsible que su presencia en todas las ciudades del mundo vaya en aumento.